Mientras la Agrupación Nacional ha dominado las elecciones legislativas francesas, sus aliados de extrema derecha han ido construyendo un nuevo bloque político en el Parlamento Europeo. Y el domingo, el grupo "Patriotas de Europa" del primer ministro húngaro, Viktor Orbán, ganó suficientes adeptos para obtener el reconocimiento en el hemiciclo.
El sábado, el Partido Popular Danés y el nacionalista flamenco proindependentista Vlaams Belang anunciaron su decisión de unirse, con lo que Patriotas por Europa cuenta ya con 23 eurodiputados, suficientes para alcanzar el umbral de reconocimiento formal del Parlamento Europeo.
Otros partidos implicados son el ultraderechista austriaco Partido de la Libertad (FPOE), el centrista partido checo ANO, el holandés Partido por la Libertad (PVV), el ultraderechista portugués Chega y el español Vox.
Francia aún no ha descubierto si la ultraderechista Agrupación Nacional de Marine Le Pen puede lograr una victoria histórica o producir un parlamento indeciso y, potencialmente, meses de estancamiento político.
Francia podría tener su primer gobierno de extrema derecha desde la ocupación nazi en la Segunda Guerra Mundial si la Agrupación Nacional obtiene la mayoría absoluta y su líder, Jordan Bardella, de 28 años, se convierte en primer ministro.
El partido se impuso en la primera vuelta de los comicios de la semana pasada, seguido de una coalición de partidos de centro-izquierda, extrema izquierda y Verdes, y de la alianza centrista de Macron.
Pero, ¿se unirá Le Pen al grupo de extrema derecha de Orbán? Es probable, y si lo hacen, se convertirían en la tercera fuerza política del Parlamento Europeo.
Según personas cercanas a las negociaciones, se espera que la Agrupación Nacional se fusione con Patriotas por Europa en los próximos días. Si todos sus miembros deciden unirse, la suma total ascendería a 86 eurodiputados. Estos incluyen los de Vox, partido de extrema derecha español que antes militaba en Europa en el grupo ECR de Meloni.
Además de hacer campaña a favor de los valores familiares conservadores y oponerse a la inmigración, el grupo pretende poner fin al apoyo europeo a la defensa de Ucrania contra la invasión rusa.
El racismo y el antisemitismo han empañado la campaña electoral francesa, junto con las cibercampañas rusas, y más de 50 candidatos han denunciado haber sido agredidos físicamente. Esto llevó al Gobierno a desplegar 30.000 policías el domingo.
Hungría asumió este mes la presidencia rotatoria de la UE, y el viernes Orbán pareció aprovechar esta posición para reunirse por sorpresa en Moscú con el presidente ruso, Vladimir Putin, para hablar de la guerra de Ucrania.
Los líderes de la UE condenaron rápidamente la visita, subrayando que no estaba autorizada por ellos y que Orbán no representaba a Bruselas.
